El 15 de febrero de 1955, moría en El Salvador, Marcelina Bonilla, escritora y educadora de gran renombre en Honduras. De inmediato, las muestras de luto y pesar se hicieron sentir entre sus amistades. Dos telegramas de pésame envíados a sus familiares, se destacan aquí: El primero enviado por Graciela Bográn, desde su residencia de San Pedro Sula; el otro, firmado por Lucila Gamero de Medina desde Danlí. El testimonio de dos hondureñas extraordinarias apesaradas por la desaparición de otra no menos destacada.
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